jueves, 17 de julio de 2008

Falta soja, maíz y carne pero vuelven los "radichetas"

Después de mucho tiempo, cuando parecían una especie en extinción resurgieron de sus propias cenizas: de quienes estamos hablando? de los radicales, aquel partido centenario resurgió de sus propias cenizas.
Anteriormente, hace unos meses el país vivía unas horas dramáticas ya que todas las mercaderías se tiraba y se despilfarraba toda la mercadería: carne, frutas, de todo un poco.
Nadie, sin embargo, podía imaginarse -en esa época- el escenario adverso para el gobierno teniendo en cuenta que la derrota se la propinaron puertas adentro con el no a la sanción de la ley 125, por parte de la camara alta del poder legislativo.
Imaginando teorías conspirativas, así estuvo todo el aparato oficialista durante todo el asunto, haciendole creer a la gente que estaba en juego la democracia, que había actitud golpista -algo que puede ser cierto pero esta vez el pueblo no picó la carnada.
Entonces era tiempo de cacerolazos los primeros para la señora presidente, quien veía como su imagen caía más rápido que un cometa, sin poder hacer mucho pero, en realidad, sin querer hacer porque confíaba en el aparato del marido -no es un juego de palabras, aclaro por las dudas-
La victoria parecía un hecho cuando la sanción pasó por diputados y las entidades rurales sólo esperaban el voto como un condenado a muerte sentarse en la silla eléctrica, pero todavía la historia no estaba escrita.
Archirrivales por siempre, radicales y peronistas parecían poder coexistir en el universo kirchnerista, pero ahora la historia vuelve a foja cero y su relación parece volver a estar como durante los sucesos del 2001 cuando los justicialistas sí hicieron el complot que sacudió la institución.
Tanto tiempo pasó pero aquellos tristes acontecimientos en los que el aparato peronista atentó contra la democracia en un actitud fría y golpista, y no como ahora, ya que el complot soló existió en la mente de los oficialistas.
Entonces fue que se le pusó la lápida a áquel partido centenario tal vez hasta ahora pese a que algún optimista legisladora diga que son todavía la segunda fuerza, pero lel pobre resultado en las últimas elecciones, de 2003 y 07, fueron paupérrimas.
Actos y más actos, pusieron al país en vilo mientras los oficialistas descontaban su victoria y todos los opositores se agrupaban a favor del campo, pero sin sospechar semejante plantón, igual auguraban un futuro no tan promisorio para la pareja presidencial.
Mucha gente festejó el resultado final sin saber que en realidad está apoyando al establishment o a la alta burguesía pero lo cierto es que por fin alguien se animó a ponerle los puntos a los mandamaces del país y fue alguien que pensaron que era su títere como el vice.
Otro horizonte aparece en la actualidad argentina, esperemos que haya madurez suficiente para tolerar el traspié, porque la figura del vice no es decorativa, sino que es muy importante, pero también deben saber que la formula debe ser homogénea en la ideología porque no se trata solo de llegar sino también de mantenerse.